El Centre de Comerç


Cal posar-se en antecedents per a poder explicar com va produir-se a la ciutat de l’Ebre tot aquest esclat burgés. El Centre del Comerç va ser l’entitat més important i aglutinadora de tota una societat que vivia el seu esplendor, la burgesia. Inaugurat el 1899 amb el nom de Centro de Comercio, va estar ubicada al rovell de l’ou de la ciutat antiga, al Palau Miravall del carrer Montcada fins al 1913.

Però aquella societat dins d’un clima de certa estabilitat política nacional, amb la bonança del comerç de l’oli, fusta, arròs... i davant la neutralitat d’una Guerra Mundial, la milloria dels transports: com el ferrocarril, els vapors, amb un important port fluvial..., no va tenir prou amb aquella seu a un carrer estret i medieval.

Tortosa a finals del XIX vivia en ebullició, amb la destrucció de les muralles i amb influències barcelonines va obrir els seus eixamples, i dins d’aquesta àrea d’influència va començar a bastir edificis modernistes. Tortosa en aquella època es situa en tercera posició d’urbs més grans de Catalunya darrere de Barcelona i Reus, i això es trasllada en edificacions tant importants com l’Escorxador (1906-1908), la Casa Matheu (1907) de Pau Monguió, l’església del Roser (1914) de Joan Abril, la Clínica Sabaté, la Casa Brunet de Vaquer i Urquizú, sols per anomenar alguns dels exemples més destacats d’aquestes construccions totes elles situant-se en nous espais urbans dissenyats per Víctor Beltrí el 1890.

Llavors i dins d’aquest context l’entitat decideix traslladar-se al que serà un nou centre, d’una nova ciutat: la Plaça Alfons XII, calia presumir i lluir les millors gales. 



Es situa d’alt dels magatzems d’oli del comerciant  Ballester i ocuparà tota la superfície de la primera planta. “El Centro” com es va conèixer popularment no escatimarà en res, i les seves sales seran plenes de luxe i pompositat adients aquella societat, on intervindran pintors destacats com Gendre i l’arquitecte Francesc Batlle. Per fer entendre millor la magnitud d’aquella seu, transcrivim completament l’article publicat al Correo de Tortosa el dilluns 13 de juny de 1913. Un reportatge molt acurat i descriptiu de l’espai, dels seus salons, d’accessos, wàters, guarda-robes, biblioteca... El seu mobiliari, teixits, pintures, escultures...  Una seu on trobar-se, reunir-se, ballar, fins i tot dutxar-se, un espai on gaudir de l’esbarjo, la política, el menjar i de la cultura.

Una exaltació, com veureu, a la societat governant i poderosa de la ciutat, però també la descripció del clímax de les voluptuositats d’aquella societat  que tampoc va saber posicionar-se davant els canvis moderns, entrant en decadència i amb ells la ciutat que regien, fins a la seva desaparició. Tota una metàfora de l’ensopiment en el que es troba la ciutat actualment, tot i que llavors, ara mateix fa cent anys, es lluitava contra el mateix.

Reportatge del Correo, que és signat per M.:
Un bello gesto.
Los amantes de Tortosa, debemos alabar todo lo que suponga una labor constructiva, cuanto tienda a robustecer su vida colectiva, porque lo que nos ahoga y nos mata es un individualismo infecundo, que atrofia todos los esfuerzos y energías para levantar nuestra ciudad de la postración en que yace. Por eso estimamos como un bello gesto, un brioso y gallardo avance en esa labor positiva, la inauguración del nuevo edificio social del “Centro del Comercio”, en la plaza Alfonso XII, una de las más importantes entidades recreativas, donde afluye nuestro comercio, industria, artes y oficios, que si su objetivo reglamentario y social es principalmente la distracción y el esparcimiento de sus socios, como presentéis a su labor asidua y cotidiana, asociase no obstante a todas las ideas, a todas las iniciativas y propósitos que tiendan al mejoramiento y adelanto de nuestra querida ciudad y al fomento de los intereses comerciales, que son el nervio de la prosperidad y riqueza de Tortosa.


La inauguración.
El sábado tuvo lugar la inauguración del nuevo local. Los socios invitados por un artístico carnet del Presidente D. José Anguera, asistieron al nuevo local, recorriendo las dependencias todas y celebrando el confort, elegancia y buen gusto que ha presidido en la instalación.
El edificio, levantado sobre grandiosos almacenes de aceite del acaudalado comerciante D. José Ballesté, y bajo la dirección del arquitecto municipal D. Francisco Batlle, responde pos su grandiosidad, comodidad y belleza, a las necesidades de la Sociedad.
Tiene su acceso por la suntuosa puerta de la calles Conde de Aranda y un vestíbulo, en el que el pincel de Gendre ha hecho primores, destacándose en la techumbre una joven matrona bella y gentil que desarrolla un pergamino en el que se lee “Centro del Comercio” sobre un fondo en que aparece el panorama de nuestra ciudad, precede a la escalera de granito, amplia y elegante, adornada en los rellanos con macetas de plantas tropicales.
Al llegar al primer piso, un amplio corredor al que afluyen el guardarropía, el teléfono, tocador de señoras, vaters clossses para señoras y caballeros y cuarto de duchas, da ingreso al salón, sala de café y otras dependencias.
El salón es el cheff d’oevre de la casa. De treinta metros de longitud por ocho de anchura y diez de alto con una galería sostenida por dos columnas, en los extremos, ofrece una visualidad soberbio. Encargada la decoración por concurso a Emilio Fumadó ha demostrado ser un artista de conciencia, de sentimiento y de gusto exquisito. Los tres arcos simulador de la techumbre dividen en seis plafones los lienzos laterales y en ellos sobre un fondo creme y ornamentación blanca a manera de artísticos esgrafiados, campea un dibujo estilo imperio, con dejos modernistas del más exquisito gusto. Como nudo y remate de las colgantes guirnaldas, destacase de cuatro óvalos con los retratos al óleo, de mucho parecido y tonos enérgicos y cálidos, de Querol, Casanova, Tió y Pedrell, cuatro tortosinos ilustres, que són honra y prez de su patria. En el techo y correspondiendo a los retratos y al arte que cultivaran aquellas personalidades, véase otros medallones con los emblemas de la escultura, pintura, poesía y música. La obra de Emilio Fumadó es notabilísima en alto grado y merecedora de la gratitud de aquella sociedad y del aplauso de todos.
Completan el decorado del salón dos preciosas lámparas doradas de estilo moderno y muy artísticas con 45 focos eléctricos cada una, suspendidas del techo; otras muchas en las paredes laterales  como piñas glaseadas, de los talleres de la Sra., Vda. de Esperanzi, corriendo las instalaciones eléctricas a cargo de Esteban Canalada.
Desde las galerías de los extremos en cuyos antepechos se destacan entre palmas de oro unos escudos con el enlace de C.C. caen cortinones de terciopelo verde sobre los que campean arrimados a las columnas sobre zócalos de roble, estatuas de bronce; y en las paredes laterales también sobre altos zócales grandes jarrones.
Amplios y cómodos divanes del mismo color de los cortinajes de alto respaldo sobre los que se levantan grandes espejos de lunas biseladas completan el decorado del salón. El mobiliario del salón ha estado a cargo del señor D. Manuel Panisello.
Al lado del salón véase la sala de café, decorada por Gendre, de un modo alegre, fresco, juguetón. En un ancho friso formado por recuadros,  ha pintado el decano de los pintores tortosinos escenas campestres y domesticas de nuestra tierra, a la manera de Teniers, que son un encanto. No se ve el zarpazo del león en ellas, pero es admirable su facundia, su laboriosidad incansable y la frescura de su imaginación. Merece nuestro amigo muchos plácemes por su obra.
Y vienen luego la salas de tresillo de tono verde, la de billares, el salón de juntas de ornamentación severa con muebles tapizados de terciopelo oro viejo, de Ramon Rico; la sala de tertulia pintada per Gendre, con divanes y butacas tapizados de rojo y una preciosa lámpara de Juan Duart; y la biblioteca. Esta, es un saloncito irregular, que da al chaflán decorado con gusto, ocupando uno de los lienzos la magnífica librería construida por José Llasat, y el centro una mesa de lectura y alrededor sillas y sillones de los Hermanos Sanz y alumbrado con una hermosa lámpara de Eduardo Lluch.
El techo del pintor Sr. García de Barcelona, revela grandes aliento, pero pobre ejecución. En el centro una escena del quijote con un escudo con el retrato de Cervantes flanqueado por unos óvalos en los tres ángulos, con los retratos de Dante, Rector de Vallfogona y Tió.
La cocina y la repostería son amplias, con todos los elementos modernos, y esta con un hermoso aparador y mesa de mármol de Enrique Miravalls.
El proyecto como hemos dicho es del Sr. Batlle y las obras de albañilería de Joaquim Pino; carpintería de Manuel Barreno; los yesos de Coll de Barcelona; y cerrajería de Conrado Barberá.



Divaguemos.
El “Centro del Comercio” tiene una casa social soberbia, digna de la populosa y simpática sociedad; y de sus socios, los comerciantes, industriales y demás que sin pertenecer a esos honorables gremios, integran también aquella entidad, encontraran una instalación magnífica, donde con todo el confort moderno podrán solazarse y distraerse de la prosa de la vida, del trabajo rudo y cotidiano y almacenar nuevas energías para volver con más ánimo, con más entusiasmo a la lucha por la vida. Nosotros nos complacemos en enviarles desde estas columnas nuestra felicitación más sincera, nuestros plácemes más entusiastas al “Centro del Comercio” y de modo especial a su junta directiva y singularmente a su digno Presidente D. José anguera, nuestro estimado amigo.
Y cumplido este deber de cortesía y de justicia, permítase a este cronista terminar esta impresión con algunas divagaciones, quizás huecas y sin pizca de enjundia, que también tienen derecho como expansión y divertimento, a divagar de vez en cuando.
Es una axioma en todos los ordenes de la humana actividad, que la unión es la fuerza y es vida; y que esa unión es la base en que se asientan la prosperidad y fortaleza de todas las colectividades, sean sociedades o centros, sean pueblos o sean naciones.
El “Centro del Comercio”, en la plenitud de su vida y desarrollo, puede ser el primer eslabón de esa cadena; y la unión de sus socios puede ser un factor importantísimo para la prosperidad de Tortosa.
Pero para que esa unión sea eficaz, sea fecunda, no basta que tenga por norma y objetivo el esparcimiento y la distracción de sus socios, sino que ha de fomentarse en ella la vida espiritual, para que en ella surjan los ideales nobles y levantamientos, únicos que dignifican la vida; y estos ideales es necesario que arraiguen, se desarrollen, florezcas y fructifiquen en aquel modesto rinconcillo donde está instalada la biblioteca; y con fé y con entusiasmo, cuando la vida espiritual vivifique el ambiente de la nueva casa y los ideales surjan frondosos y llenen con sus expansiones progresivas todas las dependencias, las necesidades de los socios, su ansia de cultura, su sed de conocimientos, su afán de perfeccionamiento moral, físico e intelectual, hará necesario el traslado de la biblioteca al salón de baile, y el salón de baile al rincón reducido y estrecho de la biblioteca. Y el nuevo edificio será deficiente, incapaz y como por salmo veremos levantar un nuevo piso, para instalar en el la enseñanza del comercio, de la industria, artes y oficios, que creará el Centro, donde los dependientes dejaron de ser máquinas autómatas inocentes, para convertirse en elementos inteligentes, útiles, llenos de fe y entusiasmo; donde los hijos de los comerciantes e industriales aprenderán a ensanchar los comercios e industrias de sus mayores, a encontrar nuevos mercados para los productos de esta región, a ser los factores valiosos y fecundos de la riqueza y prosperidad de Tortosa.
¡Cultura! ¡Ideales! ¡Progreso! ¡Soñemos alma, soñemos!, que también en este divagar hay gozo, hay placer, hay belleza… y sean mis fantásticas divagaciones, el champagne que, en la copa del bello ideal, brinda el cronista al bello gesto del “Cento del Comercio”. M



Al mateix diari una mica més abaix:

En lugar preferente, porque lo juzgamos muy justo y merecido, nos ocupamos en el número de hoy de la inauguración del nuevo local del Centro del Comercio. El explendor, el confort, la belleza, el esmero y la elegancia de sus  servicios y dependencias, acreditan el buen gusto de los artistas e industriales que han hecho las obras, secundando admirablemente las plausibles iniciativas del presidente y demás señores que componen la Junta de la referida sociedad, que se puede considerar hoy como un timbre de orgullo y un honroso galardón de Tortosa.
Durante estos días, los salones y salas de la misma han sido insuficientes para dar cabida a la numerosa concurrencia que ha visitado el referido local.
El baile celebrado anoche, fue una fiesta admirable y brillantísima. Llenaron el grandioso salón nuestras más hermosas y lindas paisanas y a pesar de la espaciosidad del mismo, hubo momentos en que se hizo difícil el baile.
Hasta las tres de la madrugada los adoradores de Terpsícore han gozado de los atractivos de su afición.
Por la comisión de obsequios, se regalo a todas las señoras y señoritas unas bonitas flores artificiales aromatizadas y que llevaban prendido un lazo de seda con la fecha de la inauguración.
Los aplausos y alabanzas que se prodigaron al nuevo local y a la labor llevada a cabo por el presidente de las referida sociedad, nuestro querido amigo D. José Anguera y demás señores de la Junta Directiva, parece que tendrán una finalidad práctica, según rumores que hemos oído. Son muchos los socios que desean exteriorizar su satisfacción y contento con un acto público en honor al presidente Sr. Anguera y Junta Directiva.
Consideramos el pensamiento muy acertado y muy merecido el homenaje que se proyecta.

Donar les gràcies a Valentí Pons per la cessió de l'exemplar del Correo de Tortosa i a J. Ramírez per les fotografies.

Si voleu veure més entrades relacionades amb el Centre de Comerç de Tortosa, premeu aquí

La font del Paiolet, II

Fa un temps vam fer una entrada sobre aquesta font de ferro colat situada al Paiolet.


Arran d'aquella publicació ens va enviar J. Ramírez aquesta altra fotografia de la mateixa font, la instantània pot completar la seqüencia de fotos anteriorment publicada. Situant-se entre els anys 36 i 37 del passat segle a ella es poden veure les primeres destrosses causades pels bombardejos, tot i que el pont de la Cinta i de l'Estat, encara restarien en peus fins l'any 1938.

La foto retrata a un jove: Manolo Marró, als peus de l'ombra de la barana del Pont de l'Estat.

Les petites històries i els xicotets fragments de vida



Fotografies de Cinta, Cinteta, Maricin, Cin, Maria de la Cinta, Rosa Cinta,... i tantes dones que han format part de la ciutat i el territori. Animeu-vos a enviar retrats d’aquestes dones, ens ajudarà a contextualitzar la societat en moments històrics, a tenir una visió més antropològica del nostre entorn i societat. La seva vida, el seu ideari, la seva família, el seu treball, la seva casa, el seu carrer, el seu barri... Són petites històries o fragments de vida que fan d’aquest lloc, un espai viu. Realment un plaer de gaudir-ho amb vatros!
Gràcies a tothom que ens aporta memòria. seveiwene@hotmail.com

L'Arròs al Delta.

Un conreu al delta des de fa més de 150 anys, que s'estén 12000 hectàrees i produeix unes 40000 tones anuals.

A la fotografia de Roisin es veu com ara fa gairebé cent anys eren els treballs i els treballadors de neteja de l'arròs posteriors a la seva trilla i abans de assecar-lo a l'era, per poder guardar-lo sense que aquest fermentí.

Imatge estreta del la pàgina Baix Ebre i Montsià Antics.

El carrer Llotja


El carrer Llotja un cop retirades les aigües de la riuada del 1907.
Un carrer enfangat on a la dreta de la instantània realitzada per Ramon Borrell i Codorniu, es veu la casa que dóna accès al carrer d'en Carbó i resseguint la filera de cases el carrer es converteix estret i canviara de nom a carrer Fusteries (era el carrer que donava pas a la plaça de les Cols), just al lloc on es torbava l'església de la Sang que donava nom a tots els carrerons d'aquell sector i que perduren fins l'actualitat. Tancant la perspectiva l'edifici on es situava la botiga del senyor Esteve amb una situació més que privilegiada. A primer terme a l'esquerra la cantonada de l'edifici del Govern Militar de la ciutat que englobava en el seu perímetre la Llotja medieval.
Als anys trenta del segle passat tota la fisonomia d'aquest sector de la ciutat va canviar fortament amb el trasllat de la Llotja al Parc i la destrucció de gran part d'edificis entre ells el de l'església de la Puríssima Sang del SVXI?, per a crear l'actual avinguda que donaria i dóna encara accés al Pont de l'Estat. Perdent així un dels sectors més humanitzats  i interessants de la ciutat.

La fotografia va ser publicada a la Il·lustració Catalana.

Una carta estripada.


En aquesta entrada transcrivim la carta que va enviar Joan Cid Mulet, des de Perpinyà.
Aquest preocupat pel patrimoni de la ciutat o la seva possible espoliació un cop acaba la guerra, es va posar en contacte amb Ramon Frontera sotssecretari de Cultura de la Generalitat i president de la comissió de Patrimoni, que li va explicar la situació del tresor.

Tal vegada per donar les dades, per coresponsabilitat, per deixar constància del seguiment de les peces artístiques i com ell bé explica per amor a la terra:  va creure oportú informar a les noves autoritats faccioses de la ciutat de Tortosa del patrimoni evacuat i salvat de la ciutat.


25/3/1939

Sr. Alcalde de Tortosa.

Distingit amic: Ignoro el vostre nom i la vostra filiació política. Vull saber només, que sou un tortosí que estima la terra i que per sobre de totes les diferències hi posa l’interès suprem dels sentiment patris.
Emparant-me en aquesta disposició vostra, m´he permès d’adreçar-vos la present, que no voldria fos interpretada d’altra manera que com la conseqüència d’un mateix estat d’esperit que el vostre. Per tant, no és altra la meva intenció d’avui que la que a través del temps ha estat norma de la meva actuació política.
Com ja sabreu, vaig tenir cura del salvament del patrimoni artístic de la nostra estimada Tortosa, feina que vaig voler realitzar que els nostres arxius fossin víctima del robatori i del saqueig. Tothom coneix, a Tortosa, la meva actuació. Cal, ara, però que tot allò que jo havia aconseguit salvar torni a la ciutat i és amb aquesta intenció que passo a informar-vos de tot el que jo sé.
L’arxiu de la Catedral i part del Notarial de casa Tuñí, va ésser traslladat a Poblet i des d’ací a Viladrau. Podeu adreçar-vos al Sr. Toda i ell us podrà donar detalls complementararis.
Tots els llibres de les Biblioteques particulars i religioses foren curosament guardats i recollits al col·legi de Sant Lluís, en els vaig deixar el mes de març de 1938.
El calze del Papa Luna, la Creu dels Montcades, la Relíquia de la Cinta i altres objectes, foren dipositats al Banc d’Espanya i traslladats a Barcelona, on segons referències, continuen encara. Una altra caixa d’objectes va anar a parar a Darnius, on sembla que les forces militars, abans de passar la frontera, veren intentar endur-se-la. Podeu fer gestions per retrobar-la.
En el pis superior de Sant Lluís hi havia classificat tot l’ornamental de la catedral. Quant menys hi era fins que el març hi arribaren les forces de Líster. Així mateix hi eren guardades unes col·leccions de pintures de la casa Dídac de León i la majoria de les imatges de la Catedral. Tots els objectes portaven una etiqueta indicadora de la seva procedència.
En fi, us poso en aquests antecedents, amb el propòsit de que una vegada feu les gestions que estimeu pertinents, puguin retornar a la ciutat tota la col·lecció de coses que de no haver estat en perill que corrien no n’haurien sortit mai.

Us saluda cordialment vostre compatrici,
Joan Cid Mulet.

Tota una mostra exemplar de comportament humanista dins del desgavell d’una guerra, un traspàs d’informació a l’enemic, a favor del patrimoni de la ciutat.

Però aquesta no va ser rebuda com calia i el senyor alcalde Loscos Mulet, desprès de llegir-la, la va estripar simplement pel fet d’estar escrita en català i per un roig, evidentment vençut i exiliat, tot i així el secretari de llavors Andreu Celma Comas va recollir els bocins i actualment encara es conserven a l’arxiu de la ciutat.

Com és ben sabut part del Tresor de la Catedral va desaparèixer o simplement resta amagat algun lloc del món. Possiblement s’hagués recuperat si s’haguessin posat en marxa les directrius d’aquell que el va salvar, però no va ser així i la part que millor va ser resguardada al Banc d’España amb les grans peces d’orfebreria ebrenca, primer a Tortosa i posteriorment a Barcelona, al ser evacuades el gener del 39 cap Le Havre (França) i pujades al iot Vita cap a Mèxic, són les que es van perdre el seu rastre.

La disseminació del Tresor és complexa; l’arqueta hispano musulmana que il·lustra aquesta entrada no va ser recuperada. Datada als segles XI i XII, era de fusta amb incrustacions d’ivori decorada amb figures dansant, cavallers i animals com un cabró, unicorns,... Però sí la seva germana que estava dipositada al Banc d’España de Madrid.

Bibliografia:

Subirats Piñana,J. (1996). Tortosa, front de guerra. Tortosa: Columna Tresmall.
Massip, J. (2003). El tresor de la catedral de Tortosa i la guerra civil de 1936. Publicacions de l’Abadia de Montserrat.

Miss Scotti a la ciutat de l’Ebre


Un conte molt real i un relat molt fantàstic. Una jove bella i estrangera equilibrista, un mariner valent i una ciutat que bullia a finals del segle XIX, són els tres protagonistes d’aquest meravellós relat.


El fet va tenir lloc una tarda del 27 de novembre del 1880. La funàmbula Miss Scotti, experta en creuar rius de tota Europa i Amèrica, va travessar el riu Ebre des de la Casa de la Diputació del General  fins al cap de pont de la ciutat de Tortosa.  Un exercici d’equilibri que durant tot el segle XIX es va posar de moda a les ciutats amb riu importants d’Europa.

 Al diari tortosí La Verdad del  28/10/1880 es relata el fet,  ens descriu que les dues ribes estaven ben plenes de gent per veure l’espectacle i el riu de gom a gom de barquetes ; “La maroma se apoyaba en el edificio que fué Aduana y en el rebellin de la cabeza exterior del  Puente”, un espectacle propi de grans ciutats com París o Londres i que mostra com la ciutat de l’Ebre, tot i haver perdut recentment la capitalitat de la província era una de les urbs més poblades i dinàmiques de Catalunya, receptora  i dins del circuït de tots aquets números tant espectaculars de circ.


La funció va començar a les 15:30 de la tarda, presentant-se Miss Scotti al tercer pis de l’anomenat edifici i va començar la travessia del riu realitzant diferents exercicis d’acrobàcia. Com sempre als números acrobàtics hi ha el més difícil encara, un cop fet el primer tram d’anada fins al cap de pont (de Barques), a la tornada Miss Scotti es va tapar el ulls: “no le faltaban mas que unos veinte pasos para llegar al balcón del que salia la Cuerda, se la vió vacilar, apoyarse sobre la maroma y caer luego desde una altura de catorce metros contra las piedras y rocas que forman los estribos de la Aduana”.  Aquesta errada va fer de l’exercici un fet remarcable i recordable a la ciutat i a la resta de l’Estat, un exemple d’aquesta repercussió la trobem al diari La Provincia d’Alacant on diu “dos valientes marineros se han tirado en seguida y la han sacado medio muerta”.

Però la història no té un mal final, de tota la gent que havia al riu per veure l’acte, Ramon Melich (el personatge valent i galant del conte): “se tiró vestido al agua y sacó a flote a Miss Scotti que en aquel momento no daba ninguna señal de vida. Colocada en una embarcación fué llevada a una posada de las Ferrerías donde ella se hospedaba”. Un cop atesa per metges i fins i tot rebuda “la unción por no estar en disposición de recibir otros sacramentos” , la funàmbula va reaccionar i traslladada a l’hospital on la van tractar per congestió pulmonar i una fractura de clavícula.

La notícia ens desvetlla més de l’altre protagonista, Ramon Melich, l’Alcalde de llavors el va proposar al Governador de la província per  “el arrojo y valor con  que se lanzó al agua..., corriendo peligro de muerte, para salvar a la desgraciada Scotti” atorgar-li una Creu de Beneficència. Mentre a ple més de desembre el Diari Català destaca a les notícies locals d’arreu del país: “la cèlebre funàmbula que, com ja saben los nostres lectors, se troba sofrint en l’Hospital de Tortosa las conseqüèncias de la caiguda en l’Ebro, adelanta ràpidament en sa curació, y es d’esperar que en un plasso breu podrém anunciar son complert restabliment”.

A la figura de Miss Scotti se la pot seguir a través de la premsa i és una mostra de com la seva fama va anar en augment posteriorment a la seva actuació a la ciutat de l’Ebre. Uns mesos després, en febrer del 1881 a l’Eco de la província, un diari valencià, surt el següent breu:


“Funciones gimnásticas: Pronto debe llegar a esta capital, la compañia gimnástica de atletas, hispano-franco-portuguesa, que dirige Mr Zzazichierwierz, procedente de París, entre cuyos artistas se encuentra Miss Scotti, celebre por sus sorprendentes y maravillosos ejercicios".

Des de la ciutat de l’Ebre encara se la recordava i altre cop al diari de La Verdad se fa ressò del succeït a València: “Trabajo en la plaza de toros de aquella capital el último Domingo. Miss Scotti pasó dos veces la maroma y cuando se disponia hacerlo con los ojos vendados, el publico se opuso a ello tenazmente". Tal vegada els espectadors coneixien els fets ebrencs o potser a la plaça va ser recordat la desgràcia ocorreguda recentment a Tortosa i d’ací la reacció tan sorprenent dels valencians.

Malauradament no hem trobat il·lustracions de Mis Scotti, ni imatges de la seva proesa a Tortosa però si de funàmbules coetànies a ella i molt probablement els seus referents, retratades com ella feia travessant rius com el Sena o Tamisí. Extretes de la pàgina: www.blondinmemorialtrust.com la relació és la següent:

  1.        Pòster datat a l’any  1852 d'exercicis d'equilibri.
  2.        Gravat d’un funàmbul travessant el Sena en condicions atmosfèriques adverses.
  3.        Il·lustració de Madame  Genevieve, durant la travessia d’un riu.

Entrada al pont de la Cinta


Imatge de l'entrada al Pont de la Cinta, des de la riba dreta al Raval de la Creu.  A ella es pot veure la caseta que regulava la circulació i des d'on es cobrava el peatge corresponent per a poder creuar-lo, altre aspecte remarcable de la fotografia a més de veure la gent que poblava el pont és el sistema d'il·luminació amb fanals i la seva estructura de ferro.
Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...